Precariedad laboral, desempleo de larga duración, salarios ínfimos, futuro incierto, falta de expectativas. Es la realidad a la que se enfrentan hoy los jóvenes españoles, la generación mejor formada de la historia. Es en esta también llamada generación perdida donde el desempleo se ceba con especial crueldad: la mitad de los menores de 30 años se encuentra en el paro. Aunque encontrar una ocupación estable con un salario que permita llegar a fin de mes es muy complicado, hay algunas carreras, estudios y oficios con buenas expectativas de futuro. A lo largo de este artículo se informa acerca de las mejores salidas laborales tras estudiar FP o una licenciatura, así como qué empleos conseguir sin una elevada cualificación.
Aunque la mayoría de los adolescentes al terminar el ciclo de enseñanza obligatoria elige su carrera por vocación, muchos de ellos tienen en cuenta sobre todo las salidas profesionales que les proporcionarán sus estudios. Hoy, más que nunca, analizar las posibilidades reales de encontrar un empleo es fundamental antes de comenzar una licenciatura, una diplomatura o un ciclo de Formación Profesional.
1. Formación Profesional
Según un informe realizado por la empresa de colocación Randstad, cuatro de cada diez ofertas de empleo se dirigen a titulados en Formación Profesional. Si hace un par de décadas este tipo de estudios estaban algo depreciados, hoy cuentan con profesionales muy bien formados en cualquiera de las ramas que abarcan. Son trabajadores con una amplia formación práctica, una cualidad muy demandada por las empresas que con frecuencia prefieren personas con FP que titulados universitarios con más conocimientos teóricos pero, a veces, con menos experiencia.
Los puestos de FP más solicitados se encuentran en el ámbito de la hostelería, la industria y la administración
Según el último Barómetro de la Formación Profesional, el 53% de las personas con un ciclo de grado medio accede al mercado laboral en menos de tres meses, porcentaje que aumenta hasta el 57% en el caso de los que terminan el grado superior.
Este es uno de los motivos por los que más de un tercio de los alumnos que terminan la enseñanza obligatoria opta por la Formación Profesional, aunque las cifras están aún lejos de las de la Unión Europea, donde se alcanza el 58%.
Los puestos más solicitados se encuentran en el ámbito de la hostelería, la industria, la administración, comercio y marketing y la informática y las comunicaciones.
2. Titulados universitarios más buscados
Pese a las elevadas tasas de paro, hay sectores que no se ven tan perjudicados por la crisis durante 2012 y, probablemente, sean una salida laboral importante para los jóvenes tanto ahora como durante los próximos años. Encaminar la formación hacia este tipo de carreras puede suponer a corto y medio plazo un importante éxito laboral.
3. Perfiles no cualificados más demandados
Frente a estos empleos, que exigen unos estudios superiores, hay otros puestos de trabajo en los que no se pide tanta cualificación y que también brindan posibilidades de colocación a jóvenes con o sin experiencia.
Los idiomas no abren todas las puertas, pero no saberlos cierra muchas
Los perfiles más demandados por las empresas son los de auxiliar de caja, promotor, gestor de venta telefónica, operador de planta química, secretaria de dirección, figurante, camarero, ingeniero superior, gestor del punto de venta, operario especialista, conductor de tripulación y dependiente.
Estos trabajos podrían absorber a los miles de parados de la construcción y el sector servicios y ayudarían a estos profesionales reorientar su carrera laboral. La formación necesaria para estos empleos puede conseguirse en poco tiempo, con cursos de escasa duración. Después, los conocimientos se perfeccionan a la vez que se trabaja.
Dominar un idioma para obtener un trabajo
La crisis no va a durar para siempre y, aunque estudiar sin ingresos es difícil, tener una formación ayuda a encontrar empleo. De hecho, las cifras revelan que son los grupos con menos estudios quienes más sufren el paro, una brecha con respecto a los más formados que ha crecido desde el comienzo de la crisis.
Los idiomas no abren todas las puertas, pero no saberlos cierra muchas. En un gran número de ofertas de trabajo, aunque se vayan a ejercer en España, se pide dominio de un idioma, en la mayoría de los casos inglés. También se valora el conocimiento de otras lenguas como el francés o el alemán.
No siempre es posible practicarlos en el extranjero, sobre todo en momentos de crisis, pero hay otras soluciones más económicas como, por ejemplo, quedar con estudiantes de intercambio y enseñarles la ciudad a cambio de conversar unas horas en su idioma.
Interesante :D
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